Rehabilitación Integral de Edificios

 

La rehabilitación Integral es la mejora de las condiciones de los edificios o la actualización de estas para adaptar el inmueble a las nuevas necesidades y requerimientos. Los motivos por los cuales se hacen estas rehabilitaciones pueden ser muy variados, puede ser por el cambio de uso del edificio, para solucionar problemas en la instalaciones, para mejorar las condiciones energéticas, etc. aunque cuando hablamos de una Restauración Integral no suele ser un solo motivo el que nos incita a la actuación, si no que normalmente son múltiples y variadas las afecciones y males que el Edificio padece.

Ahorro energético en la rehabilitación de edificios

El estudio PIE, que habla de las estrategias para rehabilitar edificios, analiza cómo va a ser el consumo energético de nueve regiones mediterráneas. Dicho estudio compara el ahorro que se conseguiría si la rehabilitación fuera parcial, por ejemplo, renovando los equipos de clima, o bien realizando una rehabilitación integral, sobre la estructura del edificio, el aislamiento de paredes o las cubiertas.

Las conclusiones del estudio confirman que el ahorro energético conseguido con la rehabilitación integral es mayor y más duradero en el tiempo que el obtenido en la rehabilitación parcial. Esto implica que la alta inversión para llevar a cabo dicha rehabilitación, se recupera rápidamente, por lo que se puede registrar el ahorro en un corto periodo de tiempo. Con este tipo de rehabilitaciones conseguimos, además, mejorar la eficiencia energética de viviendas y edificios residenciales.

Tomar este proyecto como referencia para las rehabilitaciones de edificios conseguirá estar más cerca de cumplir el objetivo marcado por la Directiva 2010/31/UE, relativa a la eficiencia energética de los edificios, de reducir el consumo energético un 20% para el 2020. A su vez, la nueva directiva de eficiencia energética, Directiva 2012/27/UE, exige a los Estados miembros que garanticen que, a partir del 1 de Enero de 2014, sus edificios públicos a partir de una superficie determinada pasan por una renovación anual para cumplir los requisitos energéticos mínimos de la directiva anterior.

Además, tener viviendas más eficientes favorece al medio ambiente, al ayudar a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.